Sobre el suicidio – Ana y Enrique Conde


Es propio de la ESENCIA DE RENACER no hacer ninguna diferencia con respecto a la causa de la muerte de sus hijos y es a partir de este hecho, que verdaderamente une a todos los padres, a trabajar sobre la transformación que representa para el futuro de nuestras vidas, la pérdida sufrida.

Sin embargo, es frecuente que se pregunte a los padres con más experiencia, cómo tratar a aquellos papás cuyos hijos se han suicidado, y aún más, pues en el encuentro de Huerta Grande 2008 se ha formulado la pregunta ¿por qué no nos referimos siempre al suicidio con el término suicidio?

Ante tal pregunta Gustavo Berti dijo: “No hay nada de malo en decir “yo perdí un hijo por suicidio” y agrega “en última instancia cada papá o mamá lo nombrará como mejor le parezca.”

En esta respuesta hay por lo menos una apertura al uso de “un lenguaje común”; suponemos que Berti intuye que es posible, también en este caso, utilizar la capacidad de hacer las cosas distintas a como parecen ser o dicho de otra manera, para ver las cosas distintas a lo que aparentan ser por los paradigmas vigentes relativos en este caso al suicidio.

Paradigmas a los que Jasper describe con precisión al decir “todos los despotismos, todas las iglesias, toda violencia que salió del hombre y pasó por el hombre, han rechazado con horror el suicidio.”

Conocemos el caso de un padre de Renacer que acudió a un cura en procura de consuelo y el cura le dijo: “su hijo está en el infierno.”

En base a estos conceptos, nos atrevemos a realizar una reflexión acerca del uso de la palabra suicidio en los grupos Renacer.

Nos arriesgamos a que pueda tildarse de “eufemismo”, es decir, según el diccionario, “una forma de expresar con decoro, conceptos cuya franca expresión se considere dura o desagradable”, aún ante ese riesgo, si usamos términos menos duros o menos desagradables, nos acercaríamos más a lo que nos inspira el amor al ser querido que toma esa decisión, fuente de nuestra intuición.

Siguiendo a Víctor Frankl, que proclama como esencial en el hombre su libertad y su consecuente responsabilidad, Gustavo Berti nos dice: “Si decimos que el hombre es un ser libre, podríamos preguntarnos inmediatamente ¿Cuál es el límite de esa libertad? ¿A dónde termina? ¿Tiene una persona derecho a determinar cuál va a ser el momento en que su vida tenga final? ¿O la libertad llega hasta ahí y ya no es libre para decidir?”

La palabra “suicidio” deriva del latín y significa “matarse a sí mismo” de la misma manera que fratricida significa “matar a un hermano”, homicidio “matar a otro ser humano” y así sucesivamente, de donde “suicidio” es sinónimo estricto de “matarse”.

¿Podemos ligar el ejercicio de la suprema libertad de disponer de su propia vida, al sentido atribuido a la palabra “suicidio”, nacida en la misma época en la que Platón sostenía que las palabras ocultan más sobre la naturaleza interna de las cosas de lo que revelan?

Precisamente, la palabra “suicidio”, al dejar oculta la libertad implícita en la decisión de quien asume la actitud de librarse de su cuerpo, oculta más de lo que revela de la naturaleza interna del hecho que pretende describir.

Por el contrario, Jasper le asigna dignidad a tal decisión cuando dice: “En el hecho de que el hombre, sólo el hombre, pueda quitarse la vida con una decisión clara, pura, sin enturbamiento por los afectos, sino más bien siendo fiel a sí mismo, en este hecho reside su dignidad.”

¿Podemos afirmar, entonces, que la palabra “suicido” respeta al ser humano libre y digno?

Dijo Gustavo Berti en Huerta grande 2003 “En Río Cuarto hicimos unas jornadas que las llamamos: “En busca de un lenguaje común”, porque nuestra tarea de modificar el futuro, incluye también modificar conceptos, modificar palabras y modificar ideas a través de la experiencia que todos nosotros vamos volcando al mundo a raíz de haber perdido hijos y de haber compartido mucho tiempo con otros papás.

Nosotros, Ana y Enrique, tenemos una experiencia al respecto, vivida antes de saber que existía Víctor Frankl, Jasper o los Grupos Renacer.

Cuando, luego de varios intentos frustrados, nuestro hijo Enriquito, partió como se diría en términos orientales, o dicho en términos usado en occidente, “cometió suicidio”, intuimos que él estaba ejerciendo su derecho a liberarse de su propio cuerpo y, entonces, en un libro que titulamos “Sueños de Libertad”, en la última página bajo el título “Camino a la Libertad”, expresamos lo siguiente:

“De tu mano recorrimos todos los senderos en busca de la luz… nos detuvimos en cada estación… en cada piedra del camino… gol­peamos todas las puertas, toca­mos todos los timbres.

Tú veías que los capítulos de tu vida estaban inconclusos… en el deporte, en el canto, en la cerámica, en el trabajo, en el estudio, en la religión, en el amor…

Debo cerrar mis capítulos, dijiste una y otra vez… y yo veía que los fantasmas rondaban tu mente y mi mente.

A cada instante lo leía en tus ojos que, profundos y tristes, me miraban como pidiendo permiso y perdón a la vez… para irte de nuestro lado…

Yo siempre te negué el permiso, pero no te negaría jamás el perdón.

Mi corazón ya lo ha hecho.

Esta mañana salimos a buscar flores para mi jardín, como en la adolescencia y tú apro­vechaste para irte… en silencio…

Luego besamos tu cuerpo tibio aún…

Por siempre recordaremos la serenidad en tu rostro, tu risa que aún retumba en nuestros oídos, tu mirada, tu estampa y la bondad de todo tu ser.

Fue un acto de amor de tu parte sustraer­nos al dolor de cada instante, para quedar alojado para siempre en nuestros corazones.

Y allí, después de llorarte con ansias, te adoraremos, por siempre, con amor.

Así se manifiesta Dios en ti y en noso­tros.

Y si detrás de cada sufrimiento hay una enseñanza… gracias por habernos enseñado a amar como te amaremos de hoy hasta la eterni­dad.

En libertad; como tú querías.”

Dos años después, el 31 de octubre de 1995, asistimos por primera vez a una reunión de Renacer y cuando una mamá nos hizo la ficha de ingreso, al preguntarnos la causa de la partida de nuestro hijo, Ana adelantándose dijo: “Por decisión propia”, lo cual fue una sorpresa pues nunca lo había comentado anteriormente.

¿Que resortes de la intuición pudieron inducir a una madre a decir impensadamente “por decisión propia” en lugar de suicidio?”

Cuando la madre que hacía la ficha escuchó la expresión “por decisión propia”, levantó la vista y miró con una expresión de dulzura en sus ojos.

Desde entonces, desterramos de nuestro vocabulario la palabra suicidio.

A partir de esta reflexión se nos hace cuesta arriba aceptar la reiteración con que en Renacer se insiste en la sumisión a la palabra suicidio equivalente a “matarse”, tan alejada de la libertad que preside la esencia de Renacer como una nueva cultura, basada en ver que las cosas pueden no ser como parecen ser y, a partir de ahí, mejorarlas dando un salto a la categoría de lo moral, en la que no sólo se inicia, sino que también se cierra el fenómeno de la ayuda mutua.

Por eso, en busca de un lenguaje común, levantamos hoy nuestra voz en procura de darle un significado más profundo a esa decisión tan extrema, desechando los paradigmas que pretenden determinarnos.

Quizá sea necesario tener una experiencia existencial para captar la diferencia o, en su caso, aceptar la intuición de quienes hemos pasado por este trance.

Quizá, para ello sea necesario llegar a descubrir el verdadero significado de la expresión tantas veces oída en Renacer “la fuerza indómita del espíritu”, que podría estar amaneciendo en la cultura occidental, sintetizado en la expresión del científico Brian Weiss, a través de este pensamiento: “No somos seres humanos que estamos viviendo una experiencia espiritual, si no que somos seres espirituales que estamos viviendo una experiencia humana.”

15 comentarios en “Sobre el suicidio – Ana y Enrique Conde

  1. Cada vez que leo este testimonio,lloro por la belleza del sufrimiento y la grandeza de los padres que unidos y de la mano pudieron compartir y transitar juntos tanto dolor, gracias por enseñarnos a ser grandes en nuestra pequeñez

  2. Yo entiendo todo esto porque yo lo vivi , voy conociendo familias que estan viviendo lo mismo y aprendo de su fortaleza gracias por compartir con personas como nosotros que no entendemos de pronto como sobrellevar este dolor, pero dia a dia podemos con la ayuda de todos ustedes GRACIAS 🙂

  3. Acabo de leer vuestra carta, ya veo que no soy yo sola la que esta pasando por esto, pues hace casi tres años que mi hijo decidio irse del mismo modo y desde entonces la vida acabo para mi, no se si algun dia podre remontar. Dejo mi correo por si alguien quiere ponerse en contacto conmigo, mrmsolera@gmail.com Gracias

    • yo tambien perdi a mi hijo hace 2 meses aun estoy en shock no encuentro el motivo por cual mi hijo decidio quitarse la vida estoy tan confundida porque cuando se muere por una enfermedad tambien no te explicas el porque o la razon si es por un accidente igual mi mama me consuela y me dice que hubieras hecho si hubiera desaparecido tu hijo,lo hubieran secuestrado,lo estuvieran torturando o no supieras de el .yo creo que cualquier cosa que les hubiera pasado a nuestros hijos seria el mismo dolor …amiga nada nos consuela y no sabemos cuanto nos dure esta pena solo se que no soy la unica que ha perdido un hijo ,solo me resta deirte que yo entiendo tu dolor

  4. ya van a ser 4 meses que mi hijo decidio partir cada dia que va pasando es mas intenso el dolor que siento por su ausencia cada rincon de la casa hay un recuerdo de el pero me parte el alma su ausencia voy a su tumba y no quiero aceptar que el esta ahi y me pregunto porque decidio quitarse la vida si tenia tantos planes y proyectos que dejo sin terminar nunca voy a tener una respuesta por mas que la busco nadie me da un motivo o tal vez fui yo la que no lo pude ayudar no se siento que voy a enloqueser solo se que cada dia lo extraño mas…

  5. LA MUERTE DE UN HIJO ES LA EXPERIENCIA MAS DESGARRADORA QUE A UNA PERSONA LE TOQUE VIVIR, NUNCA ENCONTRAMOS LA RESPUESTA NUNCA ENCONTRAMOS EL CONSUELO SOLO SABEMOS QUE NO ESTAMOS PREPARADOS PARA DESPEDIR A NUESTROS HIJOS SEA EL MOTIVO QUE SEA…UN ACCIDENTE UNA ENFERMEDAD O UN SUICIDIO TODO DA VUELTAS EN LA CABEZA Y NOS PREGUNTAMOS QUE HICIMOS MAL EN QUE NOS EQUIVOCAMOS Y SEGUIMOS SIN RESPUESTAS…SOLO NOS QUEDA UN RECUERDO VIVO EN NUESTRA MEMORIA DONDE ELLOS SIEMPRE ESTARAN VIVOS!!! UN ABRAZO A TODOS LOS PAPIS QUE CAMINAMOS DIA A DIA CON LA MEMORIA VIVA…

  6. a 6 meses de la partida de mi hijo mario aun sigue abierta la herida este dolor tan grande que siento por la partida de mi hijo donde quiera que voy llevo esa tristesa tan profunda lo unico que me consuela por un rato es orar por el y la fuerza de seguir son mi hija y mi hijo son lo unico que me queda y por ellos estoy aqui luchando por ellos y con la esperanza de algun dia volver a ver a mi may dios nos ilumine a todos los padres que estamos en duelo por nuestros hijos ¡hijo mio te quiero y te llevo siempre en mi mente y en mi corazon¡

    • hola Guada…recien hoy abro esta página, y leo tu comentario…..soy una mamá que pasó lo mismo que tú, el 30 de este mes serán 18 años….el dolor sigue, el porque de todo igual, añorarlo cada día……….pero quedaron a mi lado otros tres hijos y un esposo que se apoyaron en mi, por ellos pude salir adelante….es dificil pero no imposible….hoy valoro muchas cosas que antes no le daba importancia porque «lo mas valioso no es lo mas caro, sino lo irreemplazable»………pero tuve a mi lado algo invalorable, la compañia de mi Señor, fué quien cada mañana me daba las fuerzas para enfrentar el día, quien secaba mis lágrimas y me daba el aliento necesario para seguir adelante….gracias a El, hoy recuerdo a mi hijo con su sonrisa y bromas de siempre (tenía 19 años), teniendo memoria de los días hermosos que disfrutamos y está en mi la esperanza maravillosa del reencuentro, cuando mi Señor lo disponga……contacte conmigo si quieres…un abrazo………………………………celiparmo@hotmail.com Ana

      • gracias amiga por contestar a mis comentarios pues si aqui estoy a un año de la partida de mi hijo si que es dificil aceptar su muerte tengo una hija mayor que may y el mas chico el ya vive con su novia pero mi hija esta soltera y hago un gran esfuerzo por para seguir adelante de echo puso un negocio y me lleva con ella me ha servido estar ahi pero vuelvo a casa y regreso a lo mismo como tu espero un dia volverme a encontrar con el que dios nos mande la fortaleza y la resignacion un abrazo y gracias

  7. hola ah todos el 30 de este mes q. paso se cumplieron 4años y seis meses q. mi hijo IVAN. tomo la decision de quitarce la vida y partir dejando en mi un inmenso vacio solo deceo q. dios lo tenga ah su lado…. todo los dias derramo una lagrima por el y siento un inmenso dolor .un fuerte abrazo guada

    • hola ismael veo que a 4 años de la partida de tu hijo el dolor aun no cesa el mio cumplio un año el lunes y si asi es cada año que cumpla lo bueno de este block es que hay casos muy parecidos que nos consuela el disipar con personas que estan pasando lo mismo que nosotros pues que dios nos mande fuerzas para sobrellevar esta pena tan grande que mas te puedo decir amigos del mismo dolor

  8. El dolor no pasa se recicla,hace 18 mese que Facu nuestro hijo de 20 años partio y desde ese momento en mas estamos rengos , pero tenemos otras patitas , que son sus hermanos ,para seguir adelante y que nuestros angeles que partieron por decision propia, acurrucados a Maria nuestra hermosa y misericordiosa Madre , nos cuiden y nos miren orgullosos seguir adelante y ayudar a caminar a otros , el dia que El se fue , le prometi que no iba a sobrevivir iba a honrar la vida,en eso estoy cada dia me despierto pensandolo,
    cada !º de mes es dificil, pero recuerdo mi promesa y sigo, a veces son pasitos como de bebe, a veces el dolor me congela pero pienso en El en su risa en su empeño de hacerme sonreir y sigo cada dia despacito sigo ❤